lunes, 11 de diciembre de 2006

10/12/06

Y así continua mi caminar, pero ahora no sólo son los acordes, sino también las paredes las que cambian, se mueven, son poesía… A cada momento logro distinguir nuevos matices…Quizá es por eso que este sitio deja de serme familiar y despierta en mí una sensación de desarraigo… un refrán demasiado breve…Siento que esto de alguna extraña forma es para mejor, me acerca al centro inexistente, pero no puedo evitar la nostalgia del país de nunca jamás al cual ya no puedo regresar…Pero que más da… independiente de lo que pueda ocurrir, valoro los cambios por ser tales, porque rompen el equilibrio…

No hay comentarios: